OpenAI, la empresa que creó ChatGPT, enfrenta una demanda que alega que OpenAI usó libros con derechos de autor sin permiso para entrenar sus sistemas de IA.
La demanda se presentó en un tribunal federal de San Francisco y alegó que OpenAI copió el texto de los libros de manera ilegal al no obtener el consentimiento de los titulares de los derechos de autor, acreditarlos o compensarlos.
Esta demanda no es el primer problema legal que OpenAI ha enfrentado recientemente. Mientras los legisladores trabajan para regular la industria de IA de rápido crecimiento, OpenAI ha sido demandado en otra demanda colectiva.
Esa otra demanda afirma que los modelos de aprendizaje automático de OpenAI, incluidos ChatGPT y DALL-E, recopilan información personal de las personas de Internet de manera ilegal, violando varias leyes de privacidad.
Los resultados de estas demandas podrían sentar importantes precedentes con respecto a la inteligencia artificial, los derechos de autor y la privacidad que darán forma al panorama regulatorio en el futuro.
Acusaciones de infracción de derechos de autor
Dos autores presentaron una demanda alegando que el modelo de lenguaje ChatGPT de OpenAI copió y usó sus libros sin permiso.
La demanda, Tremblay v. OpenAI Inc, afirma que ChatGPT puede resumir con precisión los libros de terror y ciencia ficción de los autores. Esto sugiere que el chatbot ha leído y absorbido sus trabajos.
Señalando un documento de OpenAI de 2020, la demanda señala que el 15% de los datos utilizados para entrenar a ChatGPT provienen de “dos corpus de libros basados en Internet”.
Los autores creen que un conjunto de datos contenía más de 290 000 títulos de libros de “bibliotecas en la sombra” como Library Genesis y Sci-Hub, que publican ilegalmente miles de libros con derechos de autor.
Los autores alegan que ChatGPT violó la ley de derechos de autor al eliminar los avisos de derechos de autor de estos libros.
Violaciones de privacidad y robo de datos
La semana pasada se presentó una larga demanda contra OpenAI alegando que dos de sus modelos de IA, ChatGPT y DALL-E, fueron entrenados usando cientos de millones de datos de personas sin el debido consentimiento.
La demanda, titulada PM v. OpenAI LP, afirma que OpenAI obtiene información privada de personas que utilizan directamente sus sistemas de IA y otras aplicaciones que incorporan ChatGPT. La denuncia argumenta que esta recopilación y uso de datos violó las leyes de privacidad, especialmente para los datos de los niños.
La demanda afirma que OpenAI ha integrado sus sistemas con plataformas como Snapchat, Spotify, Stripe, Slack y Microsoft Teams. OpenAI está acusado de recopilar en secreto imágenes, ubicaciones, gustos musicales, detalles financieros y comunicaciones privadas de los usuarios a través de estas integraciones.
La demanda argumenta que esta recopilación de datos viola los términos de servicio de estas plataformas y las leyes de privacidad y constituye un acceso no autorizado a la información de las personas.
La denuncia nombra a 16 demandantes que usaron servicios en línea y creen que OpenAI tomó sus datos sin permiso.
OpenAI no ha respondido a una solicitud de comentarios sobre la demanda.
Consecuencias potenciales para OpenAI
OpenAI podría enfrentarse a importantes sanciones financieras si el tribunal favorece a los demandantes, lo que podría perjudicar la estabilidad financiera y la capacidad de OpenAI para recaudar fondos.
Algunas de las posibles ramificaciones incluyen:
- Las demandas podrían dañar la reputación y la confianza de OpenAI entre las partes interesadas clave, como usuarios, socios e inversores.
- Los reguladores pueden examinar OpenAI más de cerca, lo que lleva a reglas y requisitos de cumplimiento más estrictos.
- Si se descubre que el uso de datos con derechos de autor para entrenar modelos de IA infringe los derechos de autor, es posible que OpenAI y otros tengan que cambiar la forma en que recopilan y usan los datos.
- Según los fallos, las empresas que usan ChatGPT u otros productos de OpenAI pueden reconsiderar esas relaciones para proteger su reputación y la privacidad de los usuarios.
En resumen
OpenAI se encuentra en medio de varias demandas que pueden afectar el campo de la IA al establecer reglas importantes sobre derechos de autor, privacidad y cómo se pueden usar los datos.
Para cualquiera que siga la IA, es importante mantenerse al tanto de cómo progresan estas demandas y pensar en cómo podrían conducir a nuevas leyes y políticas, cambiar la forma en que se construye la tecnología de IA y exigir a las empresas que ajusten la forma en que diseñan y ofrecen productos y servicios de IA.
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