En la primera semana del caso antimonopolio del Departamento de Justicia de Estados Unidos contra Google, la empresa de búsqueda enfrentó acusaciones de que obligó a sus socios a realizar acuerdos que cimentaron su dominio.
El gobierno federal sostiene que alrededor de 2010, Google comenzó a utilizar tácticas anticompetitivas para mantener su monopolio en los motores de búsqueda.
El caso arroja luz sobre la dependencia de Google de la configuración predeterminada, las estrategias de comunicación interna y el impacto en el consumidor.
Este resumen resume los argumentos, estrategias y actores clave que dieron forma al caso.
El caso que nos ocupa
El gobierno argumenta que Google ha estado empleando tácticas anticompetitivas desde aproximadamente 2010 para mantener el control sobre el mercado de los motores de búsqueda.
Según el Departamento de Justicia, Google utilizó el “poder de los valores predeterminados” para cerrar acuerdos, asegurando la prominencia de su motor de búsqueda en los navegadores web y los sistemas operativos.
Esta estrategia incluía conseguir acuerdos con Apple y Mozilla para hacer de Google el motor de búsqueda predeterminado en Safari y Firefox y exigir a los fabricantes de Android que incluyeran de forma destacada un widget de búsqueda de Google en sus teléfonos.
Al aprovechar una gran cantidad de datos de búsqueda para refinar su algoritmo, Google ha creado un circuito de retroalimentación que, alega el Departamento de Justicia, lo ha vuelto prácticamente imbatible.
Impacto de los servicios predeterminados en el consumidor
La pregunta fundamental que el caso busca responder es cómo los acuerdos de Google con otras empresas de tecnología impactan a los consumidores.
El Departamento de Justicia afirma que las supuestas estrategias de competencia desleal de Google le han permitido evitar mejorar la Búsqueda en formas que podrían beneficiar a los consumidores, como mejorar los estándares de privacidad.
Google sostiene que hizo acuerdos que benefician a los consumidores, comparando el cambio de motor de búsqueda con el cambio de software en la era del acceso telefónico.
Mientras el gobierno critica la dependencia de Google de las configuraciones predeterminadas, Google responde que se trata de una competencia legal en la que otras empresas participan habitualmente.
El Departamento de Justicia espera convencer al juez Amit Mehta de que las tácticas de Google han sofocado la competencia de una manera que perjudica a los usuarios.
Que viene despues
El juicio continúa esta semana y la defensa de Google aún está por llegar.
La pregunta crítica para el juez es si el daño al consumidor se aplica a productos gratuitos como los motores de búsqueda.
Está previsto que el Departamento de Justicia presente su caso durante el resto de septiembre y principios de octubre.
Esperamos escuchar a testigos de alto perfil, incluido el director ejecutivo de Google, Sundar Pichai, y otros ejecutivos de tecnología.
Es probable que la defensa de Google no se presente hasta finales de octubre.